Cómo y por qué se limpian los filtros de partículas

Como sabemos, el principio de funcionamiento de los motores diésel difiere considerablemente del de los motores de gasolina. Esto, en particular, conduce al hecho de que los gases de escape producidos por los vehículos diésel contienen un carcinógeno muy nocivo: el hollín, formado por átomos de carbono no quemados. En principio, el hollín también es combustible, pero la temperatura de combustión del diesel no suele ser suficiente para quemarlo. Por lo tanto, el sistema de escape de los autos modernos incluye un componente especial: el filtro de partículas, con el fin de cumplir con los estándares de emisiones. No solo retiene el hollín, sino que lo quema de vez en cuando.
Este proceso se denomina regeneración y sigue dos escenarios principales:
1. Calentamiento de los gases de escape hasta 600-8000C.
2. Quema con un líquido especial.
La regeneración es un sistema estándar de limpieza del filtro de partículas. Según la idea de los diseñadores, gracias a ella el recurso de la unidad debería ser aproximadamente igual a la vida útil del propio vehículo. Pero se necesitan demasiadas condiciones para activar la autolimpieza, y al final con el tiempo el filtro se obstruye gradualmente, deja de quemar el hollín y finalmente permite el paso de los gases.
Los propietarios suelen solucionar los problemas con el filtro de partículas lavándolo. Sin embargo, es más común utilizar líquidos altamente tóxicos que corroen el hollín de una manera muy insegura en lugar de utilizar equipos profesionales de limpieza de DPF. Las ventajas de usar productos químicos corrosivos son bastante claras: se pueden verter directamente en el orificio del sensor, lo que evita la necesidad de desmontar el filtro.
Las desventajas también son evidentes. La química de los residuos puede ser perjudicial tanto para el medio ambiente como para el personal que realiza el lavado. Además, con este método es muy difícil entender lo bien que se limpia el sistema de escape, cuánto hollín queda en el filtro. Aunque la abundancia de suciedad que sale del silenciador da la impresión de un lavado de calidad, el resultado está literalmente oculto a la vista.
Sin embargo, existe una forma segura, eficaz e informativa de limpiar el filtro de partículas. Se trata del uso de nuestro equipo exclusivo, la máquina MS900.  

MS900 es la máquina especial para la limpieza de filtros de partículas

Para limpiar los filtros obstruidos con hollín de manera efectiva, no es necesario utilizar químicos extremadamente fuertes. Es muy posible que se sustituya por agua y aire. Combinando cambios en la dirección del flujo de agua e impulsos neumáticos, la máquina limpia todo tipo de filtros de partículas: DPF, FAP, GPF. La máquina MS900 no solo es un equipo para lavar los filtros de partículas, sino que también se puede utilizar para diagnosticar el estado de estos componentes, generando informes en forma impresa o en medios electrónicos, y secar los filtros limpiados.
Dado que la máquina tiene tres bloques, A, B y C, es posible realizar múltiples acciones simultáneamente, y el alto grado de automatización permite que una sola persona maneje la máquina. Además de trabajar con filtros de partículas, la máquina MS900 también puede utilizarse como equipo de limpieza de catalizadores.
En cuanto al agua, hay algunos detalles interesantes. En primer lugar, se calienta a unos 60 oC para el lavado. En segundo lugar, no es agua corriente, sino que se toma de un depósito interno de 250 litros, pero pasa constantemente por un proceso de purificación en tres etapas: filtros gruesos, medios y finos. El primer filtro se instala en la entrada del depósito, y como filtro medio se utiliza un hidrociclón diseñado para aproximadamente 50 DPF. Y finalmente, la etapa más fina se realiza con la ayuda de tres filtros BB20 de polipropileno, que se cambian después de la limpieza de tres filtros de partículas en promedio.
Todo esto permite el uso eficiente de los recursos hídricos, así como la eliminación adecuada y segura de las sustancias cancerígenas eliminadas del filtro de partículas. Otra característica destacada de nuestro equipo de limpieza de filtros de partículas es el software que permite optimizar al máximo el proceso y hacerlo independiente del factor humano. Se pueden programar dos unidades de trabajo MS900: los módulos A y B. En el menú de configuración de estos módulos se pueden ajustar el tiempo de limpieza y secado, la temperatura del agua para el lavado y del aire para el secado, controlar los intervalos de los impulsos neumáticos y muchos otros parámetros. Todas las características de la máquina se describen en el manual de instrucciones, que el cliente recibe en el momento de la compra.
Pero la característica más importante de la máquina MS900 es la calidad con la que limpia los filtros de partículas. Después de completar el proceso de limpieza, el filtro lavado se vuelve prácticamente idéntico a uno nuevo, tanto en su capacidad para pasar los gases de escape y atrapar partículas de hollín, como en su vida útil residual.

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